sábado, 22 de enero de 2011

De cómo me conmueve esta canción..... este poema


No se agobie no, que nada es para ya
El amor no tiene prisa,
él puede esperar en silencio
En el fondo de un armario
En la posta restante
Milenios, milenios...
Y quien sabe entonces que Río será
Alguna ciudad sumergida
Los buceadores vendrán a explorar su casa
Su cuarto, sus cosas,
su alma, desván
Sabios en vano intentarán descifrar
El eco de antiguas palabras,
fragmentos de cartas, poemas, mentiras, retratos...
Vestigios de extraña civilización

No se agobie no, que nada es para ya
Amores seran siempre amables
Futuros amantes quizas
Se amarán sin saber
Con el amor que un día,
deje para tí.....

Chico Buarque

viernes, 21 de enero de 2011

Un regalo de la vida

Todavía quedan restos de humedad,
sus olores llenan ya mi soledad,
en la cama su silueta se dibuja cual promesa
de llenar el breve espacio en que no está.


Silvio Rodriguez


Ahora comprendo como me rehusé a vivir, por miedo, tantos años... Porque vivir plenamente la vida es asunto de valentía para tomar decisiones nunca antes imaginadas. Transito un camino antes no recorrido, y todo es nuevo. Asumirme adulta ha sido el proceso más intenso, interesante y divertido en esta etapa nueva de la vida. La búsqueda por ser coherente con mis propios deseos, suave y concientemente, asumiéndome con todo lo que soy y siento; representa este momento contundente.

Hoy solo tengo agradecimiento dentro de mí.

Nada esta totalmente resuelto en mi vida, lo sé. Todo viene en camino... Quiero registrar esta sensación, de sencillamente sentirme viva y conciente de que lo único que vinimos a hacer aquí es a aprender sobre el Amor, y empiezo a entender cómo debemos dejar que éste ocurra espontáneamente... pues no hay mayor milagro.

Me entrego al universo con una multiplicidad de sensaciones dentro de mi ser, reverencio la vida por entregarme tantas manifestaciones de la grandeza del Amor perfecto que significa agradecer cada instante, cada vivencia, cada circunstancia que se presenta ante la vida, como un regalo con la mayor profundidad.

Hoy recibí un hermoso regalo de la vida, y me siento feliz... No es exactamente de la manera como yo hubiese imaginado que la felicidad iría llegando nuevamente a mi vida, y sin duda representa un reto a mi capacidad de amar.

Solo Dios sabe que lección viene con todo esto, y yo sencillamente me siento dispuesta a escuchar las señales. Por hoy sé que tomé una decisión valiente, de seguir mi corazón de manera sincera.

No sé qué viene. Pero aquí estoy. Y estoy tranquila. Gracias a Dios por este privilegio.